
¿Qué es el autismo? Una mirada clara, actual y respetuosa desde NeuroKids
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una condición del neurodesarrollo que afecta la forma en que una persona se comunica, se relaciona con los demás y comprende el mundo que la rodea.
PSICOTERAPIA


Cuando una familia recibe el diagnóstico de autismo para su hijo o hija, muchas preguntas empiezan a surgir: ¿Qué significa realmente? ¿Cuáles son sus características? ¿Qué podrá lograr mi niño? ¿Cómo será su futuro? Hoy, desde NeuroKids, queremos ofrecerte una explicación comprensible y basada en la ciencia para acompañarte en ese camino.
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una condición del neurodesarrollo que afecta la forma en que una persona se comunica, se relaciona con los demás y comprende el mundo que la rodea. El término espectro se utiliza porque no hay una única forma de ser autista: hay niños que necesitan mucho apoyo para desenvolverse en su día a día, y otros que pueden necesitarlo solo en situaciones específicas.
¿Cómo se diagnostica el autismo según el DSM-5-TR (2023)?
El manual más actualizado para el diagnóstico, el DSM-5-TR (2023), establece dos grandes áreas en las que pueden observarse desafíos:
Dificultades en la comunicación social y en las interacciones: esto puede incluir poco contacto visual, dificultades para iniciar o mantener una conversación, o no comprender normas sociales implícitas como turnarse al hablar o interpretar gestos y emociones.
Patrones de comportamiento, intereses o actividades restringidas y repetitivas: aquí se incluyen movimientos repetitivos (como aleteos o giros), apego a rutinas muy rígidas, intereses muy intensos y específicos, o reacciones inusuales a sonidos, luces o texturas.
Para que se confirme el diagnóstico, estas características deben estar presentes desde etapas tempranas del desarrollo (aunque no siempre sean detectadas de inmediato) y deben interferir de manera significativa en el funcionamiento diario.
Características comunes en los niños con autismo
Es importante recordar que cada niño es único, pero existen ciertas características generales que se observan con frecuencia:
Dificultades para usar el lenguaje de forma funcional (algunos no hablan, otros tienen un lenguaje muy avanzado pero literal).
Preferencia por jugar solo o con objetos en lugar de juegos simbólicos con otros niños.
Resistencia a los cambios en la rutina.
Movimientos repetitivos o formas peculiares de jugar.
Hipersensibilidad o insensibilidad a estímulos sensoriales.
Gran memoria visual o habilidades específicas en ciertas áreas (como los números, los mapas o los rompecabezas).
¿Cuáles son las limitaciones y potencialidades?
Muchas veces, al hablar de autismo se hace demasiado énfasis en las dificultades, sin destacar lo que los niños sí pueden lograr con los apoyos adecuados. Es cierto que algunos niños con autismo pueden tener limitaciones importantes en lenguaje o autonomía, pero también es cierto que otros desarrollan grandes habilidades en áreas como la música, la lógica, la informática o el arte.
En vez de pensar solo en limitaciones, es importante identificar los puntos fuertes y las formas distintas de aprender que tiene cada niño. Por ejemplo, algunos niños con autismo son muy visuales y aprenden mejor con imágenes que con explicaciones verbales. Otros tienen una gran atención al detalle y pueden concentrarse profundamente en tareas que les apasionan.
Las limitaciones existen, sí, pero no definen a la persona. Con intervenciones tempranas, programas educativos adaptados y un entorno comprensivo, muchas barreras pueden disminuir o incluso desaparecer.
¿Qué puede hacer mi niño con autismo?
La respuesta más sincera y esperanzadora es esta: tu hijo puede aprender, crecer, disfrutar, comunicarse y tener un futuro significativo. El camino no será el mismo para todos, y el progreso no siempre será lineal, pero el potencial está ahí.
Lo que puede lograr tu hijo dependerá de múltiples factores: el nivel de apoyo que necesita, las intervenciones que reciba, su entorno familiar y escolar, su motivación y sus intereses personales. Muchos niños con autismo aprenden a hablar, a leer, a ir a la escuela, a tener amigos, a trabajar, a vivir con autonomía. Y otros necesitarán apoyo constante, pero igualmente pueden vivir una vida con calidad, alegría y vínculos afectivos significativos.
¿Y su futuro?
El futuro no está escrito. Con el diagnóstico temprano y los apoyos adecuados, muchos niños con autismo logran grandes avances. Algunos pueden llegar a estudiar en la universidad, tener empleos y formar sus propias familias. Otros pueden desarrollarse en entornos más protegidos, pero igualmente pueden experimentar bienestar, independencia relativa y una vida emocional plena.
En lugar de preguntarnos “¿qué no podrá hacer?”, una mejor pregunta sería: ¿qué necesita mi hijo para llegar lo más lejos posible según sus propias capacidades? Esa es la base de un verdadero enfoque centrado en la persona.
En NeuroKids creemos firmemente que cada niño con autismo merece ser mirado desde sus posibilidades, no desde sus carencias. No hay un solo camino para crecer, y en ese espectro también caben el amor, la empatía, la inteligencia, la creatividad y el aprendizaje. Gracias por confiar en nosotros para acompañarte en este viaje. Estaremos aquí para ti, paso a paso.